Las gafas de ciclismo son uno de los accesorios más fundamentales en la indumentaria de los ciclistas. No es un simple elemento estético como pudiera pensarse, sino que unas gafas de ciclismo es un elemento esencial en materia de seguridad y protección, ya que no solo sirve para protegerse del polvo, insectos, aire, piedras… también ayuda en la protección de los rayos del sol, evitando la pérdida visual a largo plazo por el efecto prolongado de estos. Y su uso no impide tener una adecuada capacidad visual durante la práctica del ciclismo. Y, por supuesto, su uso no debe circunscribirse al verano, en invierno, también es oportuno utilizarlas.
A lo largo de este artículo detallaremos algunos de los motivos por los que se recomienda el uso de gafas durante la práctica del ciclismo y daremos algunos consejos prácticos para elegir un determinado modelo. Empecemos por despejar una pregunta que aún hoy en día hay más de un ciclista que debate. ¿Por qué usar gafas? La protección contra los rayos UVA. Éstos, al contrario de la creencia generalizada, no están presentes sólo en verano. Por eso es conveniente usar gafas durante todo el año, máxime al tratarse de un deporte prolongado en el tiempo. En verano, por ejemplo, pueden usarse gafas polarizadas; y en invierno pueden utilizarse unas gafas fotocromáticas. El llevar gafas también ayudará a protegerse de otros factores externos que rodean al ciclista, como el viento, el polvo, un insecto o el salto de una piedra. Las gafas evitarán tener lesiones importantes como el temido impacto de algún objeto que salte a los ojos.
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El llevar gafas no repercute negativamente en la visualización. Al contrario. La tecnología ha evolucionado y hoy en día las gafas se montan con materiales de primera generación, con lo cual no sólo aportan protección contra factores externos, sino que incluyen el plus de la seguridad al favorecer nuestra seguridad al permitirnos ver con absoluta nitidez y en cualquier circunstancia. Y, además, el uso de las gafas previene el cansancio visual y la sequedad.
¿Y cómo elegimos unas gafas adecuadas? Bien es cierto que hay muchos precios y que lógicamente dependerá del presupuesto. En cualquier caso, el primer punto a considerar, aunque parece de cierto sentido común, es rechazar imitaciones, puesto que las lentes de mala calidad juegan un efecto contraproducente frente a los factores mencionados anteriormente. Los puntos a valorar a la hora de elegir unas gafas son: certificación de la comunidad europea de las lentes; tipos de la lente; material de fabricación y resistencia de la gafa; y definición óptica. Estos últimos son elementos a conjugarse con el presupuesto con el que se cuenta. ¿Merece entonces la pena hacer una inversión? La respuesta siempre será sí y en función de nuestra actividad en bicicleta, pero las gafas de sol son un elemento importante para el ciclista. Aportan seguridad y protección. Ya sólo queda ver en topcascosbici.
